El Gobierno de Canarias, en colaboración con la iniciativa Innovación para la gestión migratoria —que forma parte de IRLab—, ha organizado este 3 de septiembre una jornada dedicada a examinar los desafíos que plantea la situación geopolítica en el Sahel y sus repercusiones para el archipiélago. El encuentro se celebró en formato webinar abierto al público y contó con la participación de especialistas de primer nivel.
Como ponentes han intervenido la doctora en Ciencias Políticas Beatriz Mesa, la experta en seguridad en el Sahel y directora del Instituto Español de Análisis Migratorio (IEAM) Beatriz de León Cobo, y el periodista José Naranjo, abordando desde diferentes perspectivas el deterioro político y de seguridad en la región, así como sus efectos en las rutas migratorias hacia Canarias. La sesión ha sido presentada por el viceconsejero del Gabinete del Presidente, Octavio Caraballo, junto a la coordinadora de Innovación para la gestión migratoria, Claudia Pérez.
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha expresado en distintas ocasiones su preocupación por la falta de respuesta de la Unión Europea ante la situación en el Sahel, reclamando políticas de cooperación que contribuyan al desarrollo económico y a la estabilidad social en los países de origen.
Durante la jornada, se ha destacado que la expansión del yihadismo, las carencias estructurales en materia de gobernanza y desarrollo, y los efectos del cambio climático generan un escenario de inestabilidad creciente que repercute más allá de la propia región. Uno de los elementos más relevantes señalados es que la reciente disminución en la llegada de migrantes a Canarias no implica un freno en los flujos, sino un desplazamiento de los puntos de salida hacia áreas menos vigiladas y de mayor riesgo, como Guinea Bissau y Guinea Conakry.
Esta modificación de las rutas responde al refuerzo de los controles fronterizos en Mauritania y Senegal, lo que ha llevado a las redes de tráfico a abrir nuevas vías hacia el Atlántico. El recorrido desde Conakry hasta la isla de El Hierro supera los 2.200 kilómetros, una distancia considerablemente mayor que la existente desde Senegal o Gambia, lo que incrementa el peligro para las personas que emprenden la travesía.
Asimismo, se ha subrayado la importancia del factor demográfico: el 60% de la población del Sahel es menor de 25 años y, según las proyecciones, en 2050 la región podría alcanzar los 500 millones de habitantes. Este crecimiento acelerado exige generar oportunidades económicas y sociales en origen, con el fin de ofrecer alternativas reales a la emigración forzada.